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Soldadura offshore vs onshore

Los procesos de soldadura offshore y onshore se diferencian, fundamentalmente, por el lugar o entorno en el que se desarrollan. 

  • La soldadura offshore hace referencia a aquellos procesos realizados en contextos marinos y portuarios: por ejemplo, la construcción, reparación o mantenimiento en plataformas petrolíferas, infraestructuras submarinas o instalaciones de alta mar.
  • La soldadura onshore, por su parte, remite a los procesos de soldado desarrollados sobre instalaciones asentadas en un entorno terrestre. Es muy común, en este sentido, encontrar estos proyectos en refinerías, oleoductos o plantas industriales de diversa naturaleza.

En este sentido, aunque la diferencia fundamental radique en el entorno en el que se llevan a cabo cada uno de los proyectos, los métodos y técnicas empleadas, por su parte, varían también para, precisamente, adaptarse a las particularidades y  condiciones específicas que presentan estos distintos contextos.

En los siguientes apartados analizamos brevemente los detalles y diferencias de cada una de ellas.

Soldadura offshore

En tanto la soldadura offshore se caracteriza por su desarrollo en contextos marinos, es conviene subrayar, en primer lugar, que dichos entornos suelen traer aparejadas unas condiciones climáticas y geográficas complejas: ubicación, lluvias frecuentes, viento, fuertes mareas, etc. Además, estas condiciones exigen prestar mucha atención a la seguridad, tanto en los elementos de trabajo como en los métodos y técnicas empleadas. En este sentido, es frecuente encontrar metodologías de trabajo más complejas que exigen una mayor especialización. De hecho, uno de los grandes requisitos de los proyectos de soldadura moderna es adaptarse no solo a las condiciones adversas, sino estar al día de las nuevas innovaciones en el sector. La formación es, por tanto, un valor decisivo.

Soldadura onshore

A diferencia de la anterior, la soldadura onshore tiene la particular de remitir a procesos realizados sobre tierra firme. En este sentido, el entorno ofrece unas condiciones que pueden considerarse algo más estables. Sin embargo, aunque la logística y acceso a los suministros es menos compleja, esto no significa que las técnicas o métodos no sean especializados: es habitual el empleo de soldadura por arco eléctrico, la soldadura MIG y TIG, así como muchas otras variedades.

Además, la soldadura onshore puede beneficiarse de avances tecnológicos y de automatización. El uso de sistemas de soldadura automatizados, robots y equipos especializados puede aumentar la eficiencia y la precisión de las operaciones de soldadura, especialmente en proyectos de gran escala. Estas tecnologías permiten una mayor velocidad de soldadura, una calidad consistente y la capacidad de trabajar en áreas confinadas o de difícil acceso.

En definitiva, debemos tener claro que las diferencias entre soldadura offshore y onshore no atienden a la metodología o técnicas empleadas, que pueden ser similares, sino al entorno en que se desarrolla cada proyecto. Cada uno de ellos, por tanto, presentan necesidades específicas en función del contexto y los elementos externos que no forman parte del proceso de soldadura en sí mismo: localización, condiciones atmosféricas, exigencias de seguridad, etc. Conviene, por tanto, ser muy consciente de las necesidades de cada proyecto y estar formado para cada circunstancia.