Innovación en la soldadura: hacia las máquinas automáticas
Del mismo modo que sucede en muchos otros sectores, la soldadura avanza hacia la automatización con máquinas. ¿Qué implica esto? Supone el desarrollo de innovaciones que permiten realizar soldaduras con mucha más precisión, aumentando significativamente la productividad y calidad del resultado. Además, este tipo de procesos automatizados suponen una gran ayuda en la reducción del riesgo de lesiones y aumentan la eficiencia del trabajo.
Automatización
Si los siglos XIX y XX suponen la eclosión de la soldadura en lo que respecta al desarrollo de técnicas y profesionalización del sector, el siglo XXI avanza, sin duda, hacia la innovación tecnológica en soldadura automatizada. Aunque aún queda mucho por avanzar y descubrir, existen ya máquinas y programas automáticos que están revolucionando el modo de realizar distintos tipos de soldaduras.
Es cierto que aún se trata de procesos que requieren una gran inversión inicial y una inversión importante en formación profesional y tecnificación. Sin embargo, los potenciales beneficios a largo plazo suponen un punto de inflexión: retrasarse demasiado en la transición hacia las nuevas tecnologías y procesos puede conducir a un impacto negativo en aquellos casos en los que no se contemple la automatización de procesos.
La reducción de tiempo y coste en los procesos productivos supone un incentivo que debe contemplarse de forma inmediata. Y no solo eso: el resultado de los procesos productivos automatizados marcará buena parte del éxito de las empresas que trabajen a partir de las nuevas posibilidades.
Tipos de máquinas automáticas
Cuando hablamos de soldadura automatizada estamos haciendo referencia a distintos sistemas autónomos que, diseñados a partir de materiales y tecnologías modernas, incluyen programas de inteligencia artificial y aprendizaje automático. Esto no solo supone que sea posible programar máquinas para ejecutar movimientos de forma automática, sino incluir una programación más avanzada a partir de la cual puedan descubrirse y desarrollar patrones nuevos de trabajo: ajustar movimientos y configuraciones en tiempo real, mejorar y agilizar los procesos e, incluso, descubrir nuevas técnicas.
En cualquier caso, actualmente podemos hablar de las siguientes máquinas de soldadura automática:
- Robots de soldadura: se trata del tipo de máquinas más comunes y consisten en un brazo robótico programable que se mueve y realiza soldaduras en áreas específicas.
- Soldadura por puntos: las máquinas con este sistema se utilizan para realizar soldaduras repetitivas y precisas en piezas de pequeñas dimensiones.
- Máquinas de soldadura autónomas: se utilizan en aplicaciones en las que se requiere una alta precisión y consistencia en las soldaduras.
- Soldadura con cabezal móvil: este sistema cuenta con un cabezal móvil que se mueve a lo largo de la pieza que se quiere soldar, realizando soldaduras en diferentes áreas.
- Programación en línea: sistemas que utilizan software de programación en línea para soldar de forma precisa y repetitiva. Son muy comunes en la producción masiva a gran escala.
Es importante tener en cuenta que esos son solo algunos de los ejemplos más comunes de máquinas y sistemas automatizados. En general, es común utilizar distintos sistemas, ya que cada tipo de pieza requiere procesos y técnicas distintas.
Ventajas de las máquinas automáticas
Como se ha señalado, aunque resulta costoso adquirir instrumentos y sistemas de soldadura automatizada, las ventajas a largo plazo son muy notables:
- Eficiencia: las máquinas de soldadura automáticas son capaces de realizar soldaduras con mayor rapidez y precisión. Esto es especialmente relevante en el caso de los procesos productivos de piezas pequeñas y complejas, así como en los procesos de fabricación en masa. Por otro lado, la tecnificación y automatización de los procesos también favorece la mayor disponibilidad de recursos para otros procesos paralelos.
- Calidad: en una técnica fundada en la precisión, el uso de máquinas automatizadas garantiza la calidad y homogeneidad de los productos finales. En muchos casos tradicionales, los resultados dependen no solo de la pericia del soldador, sino de factores como el tiempo, el cansancio o la complejidad de la tarea.
- Seguridad: la automatización implica la posibilidad de derivar las tareas más complejas y peligrosas en máquinas especializadas. Una ventaja doble: por un lado, supone un beneficio para la salud de los trabajadores y la reducción del riesgo de accidentes y, por otro, supone un ahorro de costes de gran importancia.
En general, la innovación en soldadura basada en el uso de máquinas automáticas vive un momento de desarrollo y consolidación. Eficiencia, calidad y seguridad en el trabajo son, hoy, los grandes incentivos de este proceso. Aún es pronto para decir con precisión cuáles serán los procesos y técnicas que triunfen en el futuro; sin embargo, es posible afirmar que el sector se ha instalado plenamente en el uso de la inteligencia artificial y el aprendizaje automático.